lunes, 5 de octubre de 2009

Llegamos a la “africanización”

(… ya todos estamos en el Primer Mundo)


- Política
- Teoría
- Cine






Contra todo lo que pueda pensarse, esto no es ficción. Es análisis filosófico y estudio antropológico.
El primero pertenece al ya nombrado libro Política de la ilusión (Ver Uno). El segundo al volumen Violencia y ley en la poscolonia, de Jean y John L. Comaroff (Ver Dos).
El primero es de un ignoto pensador argentino y lo editó Del signo en noviembre de 2005. El segundo es de dos especialistas, editado por Katz en setiembre de 2009.
Y hacen sinergia en un concepto: Africanización.
Existe una concordancia entre ambos, que confirma la evolución hacia una “política de empobrecimiento” global que se presenta en una fase ya visible.

“El (hemisferio) Norte
está evolucionando hacia África”
Jean y John L. Comaroff

¡Es Ciencia Ficción!
Quizás resulte reiterativo.
Ocurre que como una gota de agua que orada la piedra (al decir de Lao Tse), en Fase Final insistimos pretendiendo que se comprenda que estamos en una etapa de la historia humana absolutamente diferente de todo lo conocido. Ya no sirve mirar para atrás, no nos daría pistas del futuro. Para comprender o aceptar lo acertado de este foco que aplicamos a la realidad, un ejemplo:
Pregunta. ¿Por qué vacunarse hoy?
Respuesta. Seguramente porque llegará a nuestra realidad -en un futuro cercano- un “agente” infeccioso contra el que tal vacuna sería una defensa.
Así es. Resulta urgente aceptar que el presente está signado por el futuro.
La tontería humana premoderna del recuerdo y el saber antiguo está siendo sólo eso: una tontería… peligrosa. No permite estar preparado para lo que llegará.

Antes del comentario y un final “de película”, punteamos lo que motiva este post.

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Uno
“Africanización”
¿Es posible un proceso mundial de NeoSubdesarrollo? La respuesta está en el diseño de futuro que los centros de Poder hayan producido para el mundo, y especialmente, para los países –ya no- emergentes…”
Mayo 14, 2003

“El proyecto “NeoSubdesarrollo” puede no ser un “plan siniestro”. ¿!Qué importa!?
Preparémonos a quitarle la placenta, se trata de un “nuevo mundo”, que existe ha partir de su “enunciación”. Una silenciosa operación de parto se desarrolla en medio del ruido de rotos mercados y economías suntuosas desfallecientes, acabadas, aunque persistan caníbalmente tras lo orgánico que aún pueden ofrecer las masas humanas y los agobiados recursos naturales de todo el planeta…”
Mayo 24, 2003

> http://delailusion.blogspot.com/2007/04/neosubdesarrollo-la-obligacin-del.html
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Dos

“Violencia y ley en la poscolonia

Aunque a veces se los mire como un vestigio del pasado, los países del Tercer Mundo pueden representar el futuro, y no en un sentido de progreso.
… los antropólogos John y Jean Comaroff sugieren que "la poscolonia se ha convertido en un terreno esencial para la teorización de las ciencias sociales". Dos ejemplos de su trabajo innovador en antropología política están en el breve volumen que acaba de editar Katz, que rescata y traduce una producción que en general circula en inglés.
Los Comaroff han dedicado prácticamente toda su producción como antropólogos a analizar los fenómenos coloniales y poscoloniales en Sudáfrica; es decir, los lazos que vinculan el poder y la resistencia en su país. ¿Cómo se forman las estructuras de desigualdad en las colonias aun en ausencia de coerción física?; ¿cómo se rehace la conciencia de los grupos locales?; ¿por qué algunos usos coloniales se incorporan a la vida cotidiana y otros son rechazados? son algunas de las preguntas que han intentado responder a través de análisis con perspectiva histórica...

Una línea une ambos textos: la que señala cómo la violencia y la ilegalidad escapan a las definiciones fáciles y de qué modo la geografía global mezcla hoy informalidad, corrupción y sobornos, delito y pobreza, contradiciendo la distinción entre un norte supuestamente próspero y legal y un sur endémicamente atrasado.”
Setiembre, 2009

> http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1180458
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Conclusión
Esto es la política hoy. La que oculta detrás de la inclusión de los países “periféricos” o del sur, un acuerdo para la continuidad del status quo.

Final de película
La “africanización” ya tiene su film: Distrito 9 (otra traducción es Sector 9).
Una película en la que los “Gambas” (extraterrestres), son pobres. Viven en la periferia de Johannesburgo, confinados a no mezclarse con humanos, quienes obviamente son blancos. Extraterrestres que son controlados, perseguidos, asesinados por bandas de delincuentes (también pobres y traficantes) y por las fuerzas armadas de la MNU, las Multi Naciones Unidas.
¡Fantástico! ¿Fantástico?

PosConclusión
Si el dirigente es mujer u hombre socialista. Si se trata de una banda de corruptos o de un obrero devenido hombre muy querido por el capitalismo global, da lo mismo.
El plan es superior a nuestras posibilidades de análisis. Carecemos de suficiente información para generar alguna conclusión convincente y ligada a lo supuesto real.
Igual van unos títulos y sus links para que reflexionen los lectores… Nosotros ya lo estamos haciendo.
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El nuevo consenso capitalista en ciernes
Walden Bello
(Politólogo filipino que trabaja como director ejecutivo de Focus on the Global South, profesor de Sociología y Administración Pública de la Universidad de Filipinas e investigador asociado del Transnational Institute.)

"El reto es superar los límites puestos a la imaginación política de la izquierda por la combinación de la agresividad del desafío neoliberal en los años 80 con el colapso de los regímenes de socialismo burocrático a comienzos de los 90. La izquierda debería ser capaz, de nuevo, de atreverse a aspirar a modelos de organización social que apuntaran sin reservas a la igualdad y al control democrático-participatorio tanto de la economía nacional como de la economía global, condiciones necesarias para la emancipación individual y colectiva."
Las elites económicas y políticas empiezan a converger en una especie de solución global de tipo socialdemócrata como solución de la presente crisis económica. Pero necesitamos algo más que una gestión social, sostiene Walden Bello: deberíamos aspirar a modelos de organización social que apunten a la igualdad y al control democrático-participatorio de la economía, tanto a escala nacional como a escala planetaria…”

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