martes, 2 de junio de 2009

Mujeres y pobres al servicio de los políticos














Política - LatinoAmérica

“La búsqueda de sanciones para penalizar el incumplimiento de las leyes de cuotas, la promoción de una mayor participación política de las mujeres, los pueblos indígenas, las personas afrodescendientes, las y los jóvenes, y el impulso dado a los Ministerios de la Mujer y de presupuestos sensibles al género, son las líneas de acción más importantes que identificaron especialistas en género de América Latina…
Esto es lo que trasciende desde el Foro Virtual organizado por el Instituto Internacional de Investigaciones y Capacitación de las Naciones Unidas para la Promoción de la Mujer (UN-INSTRAW por sus siglas en inglés) y el Programa Regional de Capacitación en Género y Políticas Públicas (PRIGEPP) de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), Argentina.”

“Susana Ghilardi, política argentina, declaró que “los hombres colocan a sus esposas o familiares, quienes les garantizarán el apoyo incondicional a sus propuestas, circunstancia que no refleja la participación política de las mujeres”.
Peor aún, una vez ganado el espacio, aceptan las reglas del juego impuestas por los dirigentes políticos, que generalmente corresponden a un carácter patriarcal o son obligadas a renunciar, añadió.
Por su parte, María Esther Mogollón, periodista y asesora parlamentaria en el Perú, señaló que “si bien algunas de las mujeres que alcanzan posiciones de poder son feministas o tienen una visión de género, otras son ignorantes en el tema por lo que reproducen conductas del entorno en el que se han desarrollado".
En su intervención, Alejandra Boschetti, historiadora, investigadora y especialista en género de Argentina, puntualizó que “la presencia de las mujeres en los espacios de poder no garantiza la defensa de los derechos de las mujeres”…

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El voto no significa algo tangible para los mexicanos pobres
José Luis Mendoza Tablero, catedrático e investigador de la Universidad Iberoamericana campus Puebla, afirmó que la clase política imperante en el país es un fiel reflejo de la sociedad actual. “Por eso no deben desgarrarse las vestiduras quienes critican tanto a esos personajes. Ellos comenzarán a cambiar en la medida en que nosotros como ciudadanos provoquemos esa nueva actitud”, soslayó durante una entrevista con este medio de comunicación.

Atlixco es un buen lugar para examinar este tipo de actos “por la complejidad geográfica. Igual encuentras comunidades rurales y de alta migración o marginación y manchas urbanas estables. Estamos aquí para obtener una muestra nacional”… “y vale la pena comentarlo, contamos con antecedentes sobre la percepción y la realidad: la primera es mucho más alta comparada con la segunda. Más claro: muchos piensan que precisamente los programas del gobierno federal son los más susceptibles para la compra y coacción del voto. Sin embargo, cuando llegan a los municipios es ahí donde surge la parte más dura y perversa”.
A pesar de las anteriores referencias, “localizamos un aspecto interesante el cual aparece de manera general: ese tipo de métodos ilegales estaban circunscritos exclusivamente a la jornada electoral, y la gente esperaba la entrega de una torta o un refresco. Hoy las cosas ocurren previamente y es indispensable analizarlo incluso desde las propias sesiones del Consejo Distrital correspondiente del IFE”.
A eso vamos a sumarle una “campaña bastante negra. Y eso tiene sus razones en el ámbito nacional por la ausencia para los partidos y los candidatos de la radio y la televisión. El escándalo vende. Y el otro escenario es un alto abstencionismo. Por ejemplo, desde que el IFE planea las contiendas en las urnas, la siguiente elección es menos votada. Y una de las causas es que el marketing político no ayuda mucho”.
Para nadie es un secreto que “la gente sigue pensando en los políticos como algo muy distante de sus realidades. Y peor aun, los jóvenes de 18 años incorporados no encuentran en ellos una respuesta a corto, mediano o largo plazo. Eso es muy lamentable”.
Además, para la “cultura política latinoamericana las votaciones intermedias, como la próxima, no representan mayor interés por la falta de una figura de trascendencia”.
El “verdadero problema es que los ciudadanos no perciben el voto como algo capaz de ofrecerles un beneficio completo. Es ahí el caldo de cultivo para que alguien ofrezca 200 pesos por un sufragio. ¡Y claro que ocurre ese intercambio! Es más, hasta por 100 aceptan”.
“Los ciudadanos cambian algo intangible, como la mayoría de las propuestas, por una cosa perfectamente verificable. De ahí la correlación entre las personas de menos recursos y las personas beneficiadas con programas sociales. En el final de esto aparece la coerción: en caso de no favorecer a un partido o candidato, saldrán o seguirán en los padrones o posiblemente a la calle no llegue el pavimento y a las casas el agua potable”.

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Evidentemente, en política la cuestión es de “sujeción”, por lo menos en LatinoAmérica. Sobre esto focalizará el editorial del viernes 5 de junio.
FF

> http://www.elporvenir.com.mx/notas.asp?nota_id=312950
> http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2009/06/02/puebla/atl113.php

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